domingo, 24 de julio de 2011

Bovary


La miraba durante horas
esperando ver un diminuto silencio
desmoronarse detras de la pared,
la que construimos entre los cirrus.
interminable y andrajosa como
páginas y páginas de abreviaturas;
una detras de otra, sin significado
ni significante mas allá del pensamiento.
Y a pesar de ello, su pobre vocabulario
como un mendigo en su frase mas trillada,
se dispuso a cortar el aire como una hoja,
a endosar el sarcasmo en un bolsillo
para enderezar la espina que tanto dolor causa.
Casi sin aire a punto de desfallecer
temblando y vulnerable dispone el sentimiento...

"Te quiero"

De repente, la calma se vistió de gala
el hilado desdoblo sus formas
y el retrato mudo de su rostro
se tiño de tiempo, de largos años.
No era la misma y sin embargo,
le costó darse cuenta que al final
la vida pasa como el viento.
Simplemente tomó de su copa
y con una ultima mirada
menoscabó el amor de su amante,
Ni bueno ni malo. Desesperado
- Lo que nos mantiene unidos a los dos
no es tanto el amor en si,
sino lo que nos hace sufrir el amor.- le dijo.
Y otra vez hubo tanto viento
tanto desierto y tanto silencio.

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Dile a las palabras que no se callen,
al silencio que ayude y a los gritos que esperen,
que allá voy, o vamos, a seguir escribiendo.