domingo, 12 de abril de 2015

Cirano


Soy quien siempre te enamora
el tiempo en otro lado,
Ráfaga que cruza entre tus labios
coincidencias en una vida que nos roza.
Aquellos pendientes, mi tesoro de aliseda
encariñados como nadie de mi almohada,
mientras otros roen de tu cama
y la pregunta que se sirve en la distancia
unos, que se incendian como chicos,
otros, que se burlan de tus manos,
tus misterios, tu sonrisa
tu inmaculada indiferencia;
esa, la de una Diosa espabilada
de otro mito en otra tierra.
Soy quien siempre te enamora
un par de tazas que se enfrian
los llamados hechos a deshora
la palabra, lo del medio y lo que digas,
el espacio que nos sobra,
el deseo como un ánfora mezquina
que te moja cuando menos lo imaginas,
el desquite que ronda por tu casa
cuando es otro quien te abraza.
La compañia uraña que te busca
las solitarias sobras que te encuentras.
las excusas en la mesa....
Soy quien siempre te enamora,
y tú la única que no olvida.

Dile a las palabras que no se callen,
al silencio que ayude y a los gritos que esperen,
que allá voy, o vamos, a seguir escribiendo.