¿Qué piensas? ¿que sabes de mí?...
En tu juego de mil fases
ya no causa gracia tu reflejo
¿Desde hace cuánto ya?
¿habrá alguna vez, de nuevo?
Aunque la noche sea amplia
y miles de millones de soles
miren mi inmediatez absoluta,
rezo a las semillas, a los arados
en el velo infinito, tal vez asi,
cicatrice mi memoria
para olvidarme de todo.
Tu reflejo es mi espejismo,
pareces mi madre: eres el todo
que se vuelve vientre infinito,
los astros cercanos
agonizan y se desploman.
Quiero ser tiempo,
quiero recordarme de nuevo.
Quiero que toda la eternidad
sea la espera para que me vean,
siendo extraño, un algido cometa
de lo que alguna vez soñé ser.